Estar presente no sólo físicamente, sino que la mente esté presente, es todo un reto al momento de una capacitación. Aun cuando el instructor sea la persona más especializada o el mejor experto, es indispensable que lo acompañen técnicas adicionales que le permitan conocer su audiencia e interactuar con ella, no tiene que ver con el carisma del instructor, es técnica.
Cuando la mente, las emociones y el cuerpo están presentes es cuando el aprendizaje ocurre. Es por esta razón que existen tantos estudios, en PNL, Lenguaje no verbal, etc. Más explorados para fines comerciales. Aunque realmente este tipo de información es muy útil en procesos de aprendizaje.
Para que la atención sea efectiva en la audiencia, recomendamos lo siguiente:
Como no todos somos iguales y no nos atraen las cosas de la misma manera, es importante incluir todas las alternativas y metodologías, y reconocer la variedad de personas:
- Existen las personas que les gusta vivir, sentir o tocar, de esa manera su memoria evocará esa información. Para ellos es importante incluir actividades lúdicas, experiencias que pongan a su cuerpo en movimiento, aquello que los sacuda de una manera única.
- Otras personas son muy visuales, les atraen las imágenes, los colores, las formas que ven, las estadísticas. Para ellos es importante incluir videos, imágenes gráficas llamativas, también la imagen del instructor influirá.
- Hay quienes están más atentos por lo que escuchan, la forma con la escuchan la información, los sonidos en general. Para estas personas es importante la musicalización del entorno, la reducción o inclusión del ruido en la sala.
Como en una audiencia siempre existirá variedad de personas, es importante incluir todas las técnicas dentro de una capacitación. Una acción muy poderosa es también la meditación, porque permite a la audiencia escuchar una música que relaje a las personas, utilizar la visualización permite la sensación de descanso (oír, ver, oler, sentir, saborear) de esta manera se activan todos los sentidos para «traer» a todas las personas al momento presente.
La información Intermitente.
Le llamamos intermitencia a aquello que no se mantiene de forma rutinaria, son momentos en los que podemos interrumpir con preguntas esporádicas hacia la audiencia, que valide la información que están escuchando. Podemos realizar de manera intermitente diversidad de dinámicas, justamente para potencializar los tiempos.
Las personas sólo prestan mayor atención la primera hora, la siguiente hora su mente buscará conectar la información que escucha con su realidad actual, y posterior a esas horas buscarán nueva información que les cause interés. ¿Es o no un gran reto?
Es por esto que las nuevas prácticas de entrenamiento son más participativas, es decir, la audiencia participa más; son ellos quienes cuentan sus experiencias y en base a estas el instructor podrá introducir el conocimiento nuevo, acorde al nivel y velocidad del aprendizaje que demuestre la audiencia.
La característica de los buenos instructores.
Generalmente se confunden con buenos instructores, las personas quienes destacan por su carisma, la habilidad de
ser empáticos con la audiencia o de permitir reir a las personas, quienes cumplen este tipo de personalidad son los llamados «Speakers o Showman» esta habilidad capta el interés de la audiencia por la información y generalmente ocurre durante las dos primeras horas. Es por eso que su intervención es muy oportuna para conferencias o charlas cortas.
Es algo muy distante a la atención plena, o al aprendizaje a largo plazo. El aprendizaje a largo plazo involucra también medir los resultados, es decir, medir un cambio sostenido posterior a la capacitación. Un plan de entrenamiento requiere incluir diversidad de metodologías para captar la atención, acompañado de un plan de acción a largo plazo, que permitan generar nuevos hábitos, en ese momento el aprendizaje se habrá instaurado en la mente de las personas y se evidenciará el cambio.
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